Con la entrada de la primavera llegan los primeros rayos de sol y el buen tiempo, y nuestra agenda se llena de planes al aire libre. Las barbacoas inundan los festivos de Semana Santa, las quedadas con los amigos para ir a pasar la tarde a la playa son cada vez más seguidas, e incluso los bares montan sus terrazas al completo donde poder tomarnos algo fresquito con los amigos disfrutando del sol y las cálidas temperaturas. Pero no siempre hemos pensado en adaptar nuestra rutina facial a esta nueva normalidad.
Los fríos días de invierno y su mal tiempo han dañado la piel de cuerpo y rostro, y exponerla deliberadamente a los efectos de los rayos del sol puede ser algo imprudente, lo cual nos puede pasar factura tiempo después. De modo que deberemos adecuar nuestra rutina facial a las nuevas condiciones del tiempo para mantener la piel en perfecto estado y maximizar así los efectos beneficiosos del sol.
Pero no te preocupes, en Paco Perfumerías tenemos a punto tu skincare de primavera para que solo tengas que preocuparte de llenar tu agenda y disfrutar del buen tiempo.
¡Sigue leyendo, que empezamos…!
Rutina facial de primavera:
Por fin llegaron las subidas de temperatura, las barbacoas improvisadas en el campo y las tardes de terraceo con los amigos disfrutando de los rayos de sol. Pero si no tenemos el debido cuidado, nuestra piel puede resentirse, ya que viene de sufrir las condiciones adversas del invierno como el frío y el aire. De modo que deberemos mimarla más que nunca, y con ello conseguiremos maximizar los beneficios del sol en nuestro cuerpo y rostro.
En primer lugar, su limpieza debe ser meticulosa. Aunque este aspecto se debe tener en cuenta a lo largo del año, con el comienzo de la primavera deberemos tenerla más en cuenta, dado que, para maximizar el efecto del sol en nuestro rostro, su superficie debe estar limpia y libre de impurezas.
En esta ocasión optaremos por limpiadores que eliminen las impurezas del día a día, los factores contaminantes y los restos de polución, además de suavizar la superficie cutánea y salvaguardar las reservas de agua propias de la piel.
Sin dejar de lado la limpieza, deberemos realizar un par de veces por semana una exfoliación del rostro, para además de eliminar las impurezas en profundidad, deshacernos de las células muertas de la superficie de la piel que nos impiden que nuestros tratamientos penetren en mayor profundidad. Con esto lograremos limpiar la piel y los poros, consiguiendo una textura suave y sedosa y completamente limpia. Además, si tenemos alguna mancha en la superficie de nuestra piel, el exfoliante nos ayudará a librarnos de parte de esas células muertas sobrepigmentadas, que ya han subido a la parte superficial del rostro.
El siguiente paso en nuestra skincare de primavera será proporcionarle a la piel la hidratación que las condiciones del clima del invierno le han quitado. Como en toda rutina facial, el primero de los pasos que deberemos seguir será aplicar el contorno de ojos. Esta es la zona más delicada del rostro, dado que su piel es hasta 5 veces más fina que la del resto de la cara. De modo que su tratamiento deberá ser más exhaustivo. Añadido a esto, la primavera suele ser una estación del año puramente reactiva para nuestro organismo, motivo por el cual es la época en la que más veces nos restregamos los ojos debido a picores por alergias estacionales o sensibilidades varias. Este hecho pese a que pueda resultar placentero en el momento, daña gravemente la piel de nuestro contorno de ojos. Motivo por el cual una adecuada hidratación puede evitar posibles roturas de fibras celulares en esta zona, al proporcionarle a la piel una mayor resistencia y grosor.
Por su parte, aplicaremos el serum en rostro, cuello y escote. En esta ocasión, nos decantaremos por un tipo de serum que su principal función sea la hidratación, aunque esto no impide que tengan funciones adicionales como la función antiedad o el efecto lifting. El serum se encargará de reequilibrar la hidratación propia de nuestra piel llevando hasta los puntos necesarios el extra que la piel necesite, y hacer de vehículo conductor para que el tratamiento en crema posterior llegue hasta las capas más internas del rostro.
Como indicábamos anteriormente, tras nuestro serum, el cual nos ha abierto camino, deberemos aplicar la crema de tratamiento. Seguiremos optando por un tratamiento de hidratación para nuestro skincare de primavera. Las cremas de hidratación nos proporcionarán una sensación de frescor, alivio y confort, el cual nos ayudará a mitigar el efecto del sol en nuestra piel, y activa el propio sistema de rehidratación. Con ello lograremos una piel tersa y luminosa, preparada para captar los beneficios del sol.
Una vez aplicada la rutina de tratamiento en nuestro rostro, cuello y escote, para continuar con nuestro skincare de primavera deberemos pasar a la protección frente a los rayos de sol.
Sin a penas darnos cuenta, con el comienzo de la primavera empezamos a exponernos con mayor facilidad y durante más tiempo al sol y al aire libre, es por ello por lo que no debemos dejar de protegernos ante los efectos dañinos de la radiación solar. Desde Paco Perfumerías te recomendamos que hagas uso de un protector solar a diario, aunque pienses que no te vas a exponer al sol como tal.
Para estas ocasiones, en las que pienses que el sol no puede dañar tu piel ya que no vas a pararte en ningún sitio, puedes hacer uso de un filtro solar urbano. Y te preguntarás, ¿Qué se trata de un protector solar para la ciudad? Pues este producto surgió de dicha idea.
Y es que, aunque creamos que el sol no puede atacar nuestra piel si no nos exponemos a él de manera directa, parando nuestro cuerpo bajo él, lo cierto es que el sol daña nuestro cutis incluso dentro de la oficina, a través de los rayos que entran por la ventana. Es por este motivo por el cual puedes incluir un filtro solar urbano en tu kit de rutina facial de primavera, ya que se encarga de protegernos de la radiación solar durante todo el día, solo con el mero hecho de salir a la calle o asomarnos a la ventana.
El ataque de la radiación solar en nuestra piel es uno de los principales causantes del envejecimiento cutáneo, es por esto por lo que debemos protegerla frente al sol, evitando así su envejecimiento prematuro.
Pero sin embargo, si sabes a ciencia cierta que vas a disfrutar del sol de manera directa o que vas a pasar el día entero al aire libre, bien sea en la playa o en la montaña, deberás hacer uso de un protector solar tradicional. Puede que pienses que no aprieta tanto el sol como para hacer uso del protector, o incluso seas de esas personas que piensa que por estar nublado los rayos solares no inciden sobre nuestra piel, pero nada más lejos de la realidad. Y es que la sobreexposición a la radiación solar puede ser dañina durante los 365 días del año.
Cierto es que su acción es más dañina en las estaciones de primavera y verano especialmente, pero durante todo el año podemos sufrir quemaduras solares.
De modo que, al tratarse de las primeras exposiciones del año, optaremos por un protector de pantalla total con el más alto factor de protección, es decir, SPF50.
Y tanto si haces uso de un filtro solar urbano como si haces uso de un protector solar facial tradicional, deberás aplicarlo tras tu rutina de tratamiento habitual (contorno de ojos, serum y crema), siempre dejando absorber debidamente cada uno de los productos antes de aplicar el siguiente.
Recuerda que la protección solar debe reaplicarse cada 2h para disfrutar de una protección adecuada ante la radiación solar. Un formato útil para esta acción puede ser un protector en formato bruma, ya que no debe extenderse, sino que únicamente debes pulverizarlo cerca de tu rostro, consiguiendo además ese extra de hidratación que la piel necesita.
Por último, si deseas maquillarte y aplicar una base de color en tu rostro, tienes dos opciones para ello. La primera es inclinarte por una CC Cream con filtro solar. Con ello conseguirás cubrir tus imperfecciones e igualar tu tono a través de una crema correctora con color, además de conseguir una protección extra frente al sol, ya que dispone de SPF.
Pero si lo que quieres es decantarte por una base de maquillaje al uso, puedes incorporarla a tu kit de rutina facial de primavera ya que dispones de numerosos maquillajes que incorporan en su formula protección ante la radiación solar por mediación de un SPF.
Pero tanto si optas por una CC Cream como por una base de maquillaje con factor de protección, debes tener claro que su aplicación siempre se realizará tras la absorción del protector solar facial al completo.
Rutina facial de primavera:
No debemos dejar en el olvido la piel del resto de nuestro cuerpo, ya que al igual que la del rostro, también ha sufrido las condiciones del clima del invierno, y poco a poco irá siendo expuesta a los rayos del sol y la subida de temperaturas.
De modo que al igual que con la cara, deberemos exfoliar el cuerpo al completo, eliminando así las impurezas y células muertas, e hidratarlo correctamente para proporcionar mayor resistencia a nuestra piel y así poder lucir una piel suave, sedosa y uniforme bajo los rayos de sol.
Y al igual que con el rostro, debemos proteger la piel del resto de nuestro cuerpo frente a la radiación solar. Poco a poco la manga larga desaparece de nuestros armarios para dar paso a las mangas cortas, los tirantes o las faldas. Esa piel que antes permanecía cubierta todo el día por nuestra ropa, ahora se encuentra expuesta y debemos protegerla para que no sufra daños.
Al tratarse de las primeras exposiciones de sol al año, al igual que con la cara, elegiremos protectores solares con factores altos, SPF50. Ya que los melanocitos aún no están en pleno rendimiento y no serán capaces de enviar a la superficie de la piel la suficiente melanina para protegerla, de modo que pueden aparecer abrasiones y quemaduras al dañarse las células epidérmicas superficiales.
Con ello también ayudaremos a prevenir el envejecimiento prematuro de nuestra piel y su deshidratación.
Finalmente, tanto para nuestro rostro, cuello y escote como para el resto de nuestro cuerpo, si queremos maximizar el bronceado adquirido a la vez que rehidratamos nuestra piel y cuidamos su barrera protectora, añadiremos como último paso a nuestro skincare de primavera el aftersun.
Este lo aplicaremos tras la exposición solar por todo el cuerpo, después de la ducha sobre la piel seca y masajearemos suavemente por toda la superficie hasta su completa absorción para maximizar sus beneficios, calmando e hidratando la piel.
Con estos sencillos pasos lograrás adecuar tu rutina de belleza a la nueva estación, abarcando así todas las necesidades y cuidados que tu piel requiere en este preciso momento, consiguiendo así un completo y fácil skincare de primavera.